Chile: La incertidumbre y el quinto retiro de fondos de pensiones

La pandemia cede y hay menores restricciones a la movilidad, pero la alta inflación ha generado presiones políticas por un nuevo retiro de fondos de pensiones de las cuentas de capitalización individual, a ser sometido a votación este lunes 18 de abril.

Debido a la pandemia, en los últimos dos años se aprobaron en el congreso chileno tres retiros de las cuentas de los fondos de pensiones, además de masivos estímulos monetarios y fiscales, entre los mayores del mundo relativo al PIB. Sólo los retiros, significaron USD 50 mil millones inyectados a la economía.

Ello contribuyó al incremento de las presiones inflacionarias, que ya aumentaban en el plano externo por las disrupciones en las cadenas de suministros que generó la pandemia. En este contexto, la inflación de marzo alcanzó 9.4% en doce meses, el mayor registro desde 1993.

Dado esto, y a pesar del mejor contexto sanitario, se propuso un nuevo retiro de fondos previsionales, el cual podría sumar hasta USD 15 mil millones. El gobierno, para evitar que esto se materialice, presentó un proyecto de retiro alternativo, que permite retiros para pago de deudas y podría ascender a los USD 3 mil millones. Los precios de los activos locales no registraron mayor reacción a los anuncios de retiro, y las acciones mantienen sus valorizaciones en mínimos históricos.

El proyecto del gobierno es el que tiene mayores probabilidades de avanzar, y generaría retiros que no presionarían significativamente la inflación. Ello porque se destinarían directamente a la institución con la cual la persona mantiene su deuda (sin agregar liquidez directa a los hogares) y por su menor tamaño.

No obstante, la promoción de retiros de fondos de pensiones da popularidad a los políticos, por lo que se ha convertido en una herramienta de uso sistemático de parte de los parlamentarios. De hecho, ya se ingresó la propuesta para un sexto retiro.