OUTLOOK 2024: Año de definiciones
Al terminar 2023, la tasa en EE.UU. está en 5.5%, pues la resiliencia de la economía norteamericana ha sido destacable y recién comienzan a verse ciertas señales de debilidad. La inflación ha sido resistente y después de estar aún cercana a 4% hasta septiembre, en octubre se vio una baja significativa a 3.2% anual, llegando a 3.1% en noviembre. No obstante, los precios subyacentes, no volátiles, están aún en 4% anual.
Por su parte China, aunque dio un giro en su política, los estímulos y señales del gobierno no fueron suficientes para recuperar la actividad, ni la confianza de los inversionistas extranjeros y consumidores e inversores locales. La crisis inmobiliaria persiste y el gobierno “rescataría” al sector, pero está enfocado en el rebalanceo del crecimiento hacia la demanda y el consumo.
El segundo gran tema es que el riesgo geopolítico seguiría presente y afectando el quehacer mundial. Ciertamente las tensiones y guerras han estado presentes: controversias entre China y Estados Unidos en torno a Taiwán, sanciones varias en diversas regiones y países, se “eternizó” la guerra en Ucrania y estalló la guerra entre Israel y Hamás.
La desglobalización y regionalismo que mencionamos un año atrás se refleja en un mundo multipolar consolidándose, con múltiples características en varios ámbitos. Guerras; la de Ucrania perpetuándose en el tiempo y un reacomodo social, geopolítico y económico al estatus quo; la de Hamás e Israel que probablemente volverá a una situación de inestabilidad, tensión permanente y desequilibrio que se vive en la zona hace décadas; y ambas con costos humanos y sociales enormes e irreparables. Otra cara de los efectos de este mundo multipolar se da en dinámicas económicas producto de cambios en las relaciones internacionales. Entre ellas están el nearshoring y friendshoring (movimiento de actividades de empresas desde China hacia la India y México, por ejemplo).
Finalmente, el cuarto gran tema, la transición energética, siguió su curso, pero en términos de ritmo de avance éste se habría desacelerado y la geopolítica y el cambio climático con desastres naturales asociados hicieron que la demanda y producción de combustibles tradicionales creciera.
2024 sería en el año en que se defina el desenlace del ciclo económico actual, el que comenzó con la recuperación post pandemia en el tercer trimestre de 2020. Por primera vez desde los 80s la economía global entró en un clásico ciclo económico de recuperación-aceleración-
Para 2024, según nuestro análisis, entre los temas determinantes de la tendencia de los mercados globales destacan:
III. ¿Cómo se adaptarán la economía y mercados a la geopolítica? ¿Se están subestimando riesgos?
IV. El 2024 será un año de elecciones en 67 países, lo que implican 3,600 millones de personas y el 60% del PIB global. Estados Unidos, la Unión Europea, Reino Unido, India, Rusia entre ellos.
Los riesgos hacia 2024 son, (i) que se haya producido o se produzca errores de política que lleven a una recesión profunda; (ii) geopolíticos: un desenlace catastrófico de los conflictos y tensiones presentes, lo cual se entrelaza, en parte con, (iii) riesgos digitales y de ciberseguridad, aunque éstos también están relacionados a los delitos, mafia, narcotráfico, y terrorismo; (iv) eventos climáticos extremos disruptivos y; (v) riesgo sanitario, relacionado a potenciales nuevas pandemias.
En cuanto al posicionamiento para comenzar el año, no se realizaron cambios en la asignación de activos. Manteniendo una posición neutral en acciones globales con asignaciones que favorecen a Japón, América Latina y Asia emergente ex China. Se dejó UW en renta fija para mantener una asignación en caja (moderada). Dentro de renta fija se bajó la asignación en bonos de Tesoro con altas rentabilidades recientes y se neutralizó la asignación a TIPs (indexados por inflación), pues en noviembre las tasas habría sobre reaccionado (demasiado y muy rápido) a los datos de inflación positivos y señales de debilidad en la actividad en Estados Unidos.