China ¿brotes verdes?

•    Entrada de flujos domésticos 
•    Valorizaciones aún atractivas
•    Estímulos fiscales y monetarios dan soporte

En un escenario donde el entorno político y económico en China exhiben una notable volatilidad, los cuestionamientos sobre la invertibilidad en sus activos dan paso a nuevas perspectivas. Se deben reevaluar las estrategias y encontrar oportunidades dentro de este contexto en constante evolución. 

Perspectivas económicas
La Asamblea Popular Nacional de China (NPC por su sigla en inglés) finalizó este año sin el discurso final de Xi Jinping y sin la conferencia del primer ministro, dando señales de mayor concentración del poder político y falta de comunicación. Sin embargo, la prensa nacional elogia al presidente Xi y lo destaca por impulsar reformas market-friendly similar a Deng Xiaoping (líder chino que jugó un papel crucial en la rápida expansión económica de China).

Por otro lado, la instancia consolidó el poder de Xi, ya que se habría votado a favor para realizar cambios en la estructura del Consejo de Estado, que incluirían al vice premier y jefe del Banco Popular de China. Aunque su impacto no está claro, le daría mayor poder de supervisión a las cabezas del Partido Comunista sobre el gabinete.

Durante el congreso se definió la meta de crecimiento económico en 5% para 2024, además de disminuir el déficit fiscal a un 3.3% del PIB, desde el 3.8% revisado en 2023 (Tabla 1).

Con respecto a la actividad económica, se vislumbran mejoras. El PMI Caixin de manufacturas continúa en terreno de leve expansión en febrero (50.9 pts.), mientras que el de servicios se encuentra en 52.5 pts. (50 pts. neutral). A su vez, las exportaciones se expandieron 7.1% interanual en lo corrido del año, incorporando enero y febrero. En la misma línea la producción industrial y las ventas minoristas acumuladas entre enero y febrero sorprendieron al mercado y crecieron un 7.0% y 5.5% anual respectivamente.  Por el lado de la inflación, esta se aceleró a 0.7% en doce meses en febrero y dejó atrás 4 meses de datos en negativos, lo que el mercado tomó como positivo.